Arrancó mejor el Funebrero, sólido en el fondo, con Mellado y Nizzo en la recuperación, y Aliendro y Melivilo colaborando. Arriba todo lo que significa la presencia de Achucarro que se notó mas su ausencia en la segunda etapa por lo que significa aguantando la pelota, sosteniendo al equipo en el campo rival, y dándole aire a una defensa que cada vez se está convirtiendo en algo más importante en este Chacarita versión Fernando Gamboa.
Tuvo sus oportunidades el Funebrero, primero en los pies de Jonathan Menéndez cuando quedó mano a mano con Pedro Fernández, y éste le adivinó la intención tirándose hacia su izquierda. Despúes Aliendro en una jugada por derecha pudo abrir el marcador.
Por el lado del rival, la estrategia era dejar libre a Pedrosa para que Chacarita salga por ese sector y cuando la tenía el lateral salían a presionarlo; así consiguieron apurar al juvenil defensor de Chacarita que pasó por situaciones que pudieron comprometer al Funebrero.
En la segunda etapa el partido se hizo más parejo. Entró Elías Zapata por Achucarro y más allá de las características individuales de cada uno de ellos, Chacarita notó la ausencia del paraguayo, porque Zapata no la pudo aguantar de la misma manera, porque la pelota volvía rápidamente y por la jerarquía del jugador que llegó a San Martín como refuerzo.
Así el partido se hizo parejo y aburrido sin grandes situaciones.
Dálmine pudo convertir pero una gran salvada de Paredes lo impidió. Levantó el "Mono" su nivel en los últimos partidos.
Así se llegó al final y Chacarita nuevamente pudo mantener el cero en su arco, pudo haber convertido algún gol, pero fundamentalmente pudo sostener el invicto.
Ahora se vienen dos compromisos muy importantes, uno por Copa Argentina (frente a Defensa y Justicia), y Atlético Tucumán en San Martín.
Se trae un buen punto de Campana que sirve para seguir sumando en esta etapa, salir de la zona de descenso, y fundamentalmente cambiar la visión, ahora Chaca mira para arriba.
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