Más de lo mismo. Por Gustavo Szpigiel


Chacarita empató con Atlanta en Villa Crespo 1 a 1. Ganaba 1 a 0 con gol de Masuero y empató el Bohemio por intermedio de Galeano de penal.

Con el ingreso de Blanco por Hoyos, Centrone mantuvo los mismos 10 que habían perdido con Estudiantes de Buenos Aires sobre el final la fecha pasada en San Martín.

El volante creativo volcado a la derecha y Juan Cruz González a la izquierda. Creemos que la búsqueda estaba destinada, entre otras cosas, a meter diagonales y pegarle al arco. Casi no tuvieron oportunidades. Godoy estaba sentido y se notaba. A los 10 minutos comenzaron a hacer precalentamiento Parra y Ronaldo (Tevez estaba en la tribuna), pero no ingresaron.

El partido era flojo y solo se mantenía el interés porque es un clásico, ninguno lo quiere perder y hace 38 años que Chaca no pierde en el León Kolbowski. La gente, que llenó la tribuna aunque había muchos claros en la platea, lo tomó como una final.

Chacarita no mostró nada diferente a lo que viene mostrando en los últimos tiempos y que lo llevó a bajar desde el tercer puesto de la tabla de posiciones al dieciséis y quedar afuera de los trece que clasifican al reducido.

Un equipo que no tiene (o no aplican) una idea definida de cuál es su estrategia de juego, tiene muchas falencias defensivas con errores individuales de concepto alarmantes y fallas en  momentos de decisiones.

Ayer se puso en ventaja en la segunda etapa con gol de Masuero a la salida de un córner. Iban 21 minutos. 4 minutos después Centrone hace ingresar a Parra por Godoy. Si Godoy estaba lesionado, está bien que salga, pero ¿era Parra el que debía ingresar cuando claramente era un partido que estaba dado para el contragolpe? Podía ser que ingrese Facundo pero a la vez debía ingresar alguien más veloz o tal vez Hoyos para sostener el juego y asociarse con Blanco para habilitar a Russo. Son lecturas diferentes que pensamos en el momento del cambio y sostenemos  cuando vemos cómo se desarrolló el juego posteriormente.

Atlanta, con muy poco, se vino encima y cuando la gente comenzó a ponerse nerviosa viendo que el partido se les iba con una nueva derrota, vino el inocente penal de Rosso, que recién había ingresado y tomó de la camiseta a Klusener delante del árbitro. Galeano cambió por gol.

A esa altura, sin Fredes, Blanco y Godoy en cancha, Chaca se aferraba al empate que finalmente llegó y dejó un sabor amargo.

Chaca volvió a jugar mal y Atlanta no le pudo ganar en Villa Crespo, en definitiva, fue más de lo mismo.

Gustavo Szpigiel


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