Debió ganar, el árbitro y la mala definición se lo impidieron. Por Gustavo Szpigiel


Chacarita jugó tal vez uno de sus mejores partidos del torneo contra un rival directo en la lucha por entrar al reducido, Deportivo Riestra, pero empató 1 a 1 y ante un estadio colmado y fervoroso, dejó pasar una gran oportunidad. Muchas oportunidades netas de gol desperdiciadas, un gol legítimo que anuló el árbitro Lucas Comesaña a instancias de juez de línea Lucas Ferrari ( en la foto de portada se ve la posición de Russo cuando ya partió el centro de Godoy), además de no medir de la misma manera las faltas de ambos equipos, incidieron para que el Funebrero no se llevara los tres puntos. El gol de Chaca lo hizo Godoy a los 40 de primer tiempo. Había abierto el marcador Lázaro Romero a los 23 de esa primera etapa.

Con homenajes a Carlitos Balá, fallecido el último jueves, antes de partido se recordó con banderas en las tribunas y un minuto de silencio bajo un aplauso cerrado de todo el estadio, al famoso humorista, hincha y socio honorario de club.

El encuentro comenzó con un Chacarita lanzado en ataque. Un tiro en el palo de Blanco, remates de Godoy, Perdomo, Russo y Tobías González en seguidilla hacían presagiar que el gol de Chaca estaba al caer. Pero sorpresivamente una irrupción de Insúa por izquierda terminó en un centro que agarró a contra pierna a la defensa y culminó con el gol de Romero. Baldazo de agua fría en toda la cancha.

De a poco el equipo salió de la sorpresa inicial y 17 minutos más tarde un corte de Perdomo, que se manda en ataque y le coloca una pelota en profundidad a Godoy, y esta vez si el nueve de Chaca no perdonó y definió con categoría ante la salida de Vega.

El equipo, dirigido por el “Ogro” Fabbiani y gerenciado por Víctor Stinfale y que, llamativamente tiene la inscripción de Irak en la espalda de su camiseta, vino a hacer lo que le convenía, cortar con foules y hacer todo el tiempo posible, ante la permisividad de un árbitro que durante toda la semana fue cuestionado por la gente de Chaca; finalmente con razón. Amonestó a jugadores locales y ante la misma falta no hizo lo mismo con los visitantes. A Berra le hicieron dos penales y en ambos casos cobró foul del defensor. Y cuando Chaca se ponía en ventaja cuando Russo convierte ante un centro de Godoy, le cobra offside al delantero a instancias del juez de línea. La televisión indicó que estaba habilitado. Y en la última jugada del partido del encuentro, con Chaca volcado en ataque y Alvacete a punto de tirar un centro, le cobra un empujón inexistente a Parra. De ese tiro libre vino el final del partido. El banco de Chaca, que ya sabía del gol mal anulado, se le fue encima y se vieron dos tarjetas rojas.

El árbitro sin dudas influyó pero no se puede soslayar la ineficacia a la hora de definir hoy el Funebrero. Algo que siempre fue su fuerte. Ahora solo queda ganar los dos partidos y que los de arriba puedan perder puntos. Eso le dará nuevamente chances. Y que no vuelva a dirigirlo ningún “Comesaña ” más

Por Gustavo Szpigiel


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