El domingo
son las elecciones en Chacarita. Una nueva oportunidad que tiene el socio de
elegir seguir por este camino o modificarlo votando otra propuesta.
Conozco a
casi todos los integrantes de las dos listas en mayor o menor medida y estoy
seguro de que todos ellos me conocen a mí por la exposición que brinda ser
periodista.
Es por eso
que este mensaje va dirigido a aquellos que resulten ganadores: es una tremenda
oportunidad que tienen en la vida de quedar en la historia. Pero para eso deben
modificarla.
Para no
herir ninguna susceptibilidad voy a decir que a Chacarita se lo viene
dirigiendo desde hace muchos años como una institución de la B Metropolitana.
No se
piensa en grande. No se actúa en grande. Siempre se dependió del “bolsillo
salvador”. Eso es de otra época, cuando los que dirigían instituciones eran
empresarios en un país casi sin inflación y previsible.
La única
manera de cambiar la historia es modificar el sistema de conducción de la
institución. Sea quien sea el que la dirija. Cuando aparece la remanida frase
“el club es de los socios”, se le miente en la cara al socio. No es verdad.
¿Cuál es el derecho que tienen los socios?
Creemos que
este modelo de conducción está agotado. Las dos agrupaciones lo saben. Como lo sabemos todos. La que gane deberá modificarlo. Para no volver a tropezar con la misma piedra siempre.
Chacarita
tiene que profesionalizarse en todas las áreas y los dirigentes deben
supervisar la gestión.
Debe haber
un proyecto a 5, 10 y 20 años. Debe haber un verdadero departamento de
Marketing; un departamento de comunicación, un departamento de infraestructura;
un departamento de gestión deportiva; un departamento de búsqueda de talentos;
asociarse con una empresa para la terminación del estadio (Departamento
comercial)…y así podemos enumerar una larga lista.
Que en la
AFA o en la Liga el club esté representado por un profesional y que sea
acompañado por un dirigente que se encargue de las relaciones.
Que cada
dirigente sea responsable con su patrimonio de lo que firma en nombre del club.
Chacarita
tiene que volver a ser el equipo “que le caía bien a todos” y no ser el que
sale en los medios solo por los conflictos.
Cada vez
que se acercan las elecciones sueño con el cambio. Con un club del que nos
sintamos orgullosos. Soy parte de una generación que lo vio campeón, que lo vio
pasear su fútbol por el Camp Nou, que lo vio llenar las dos bandejas de la
Bombonera y sentirme orgulloso cuando siendo muchos menos cantamos mucho más en
cualquier cancha. Una generación que cuando entraba a la cancha lo primero que
hacía era mirar la tribuna a ver a “su hinchada”. Una generación que estuvo en
la C y llenó todas las canchas. Una generación que transmitió a sus hijos la
pasión. Una generación que no se quiere ir sin volver a sentir todo esto.
Ustedes
pueden ser los primeros en iniciar ese cambio. No se vuelvan a equivocar.
Gustavo Szpigiel
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