Chaca recibió un fuerte revés al perder en San Martín 4 a 1 frente a Defensores de Belgrano. El gol del Funebrero lo hizo Maximiliano Meléndez, el juvenil que jugó su segundo partido con la camiseta tricolor.
Es evidente y no hace falta aclarar que el equipo de Aníbal Biggeri está pasando por un terrible momento anímico y futbolístico. Las causas son múltiples pero lo que queda claro que el equipo hoy está más para intentar salir del pozo que tener otra pretensión.
Del partido no hay mucho para hablar. La sensación que dejó el encuentro hoy es que jugaban dos equipos de distinta categoría. Ni el gol de Meléndez que puso en ventaja al local después de una jugada preparada a la salida de un tiro libre con la triangulación de Beltramone a Pombo, pase al segundo palo donde apareció el juvenil chacaritense para definir.
Cuando todo indicaba que podía encontrar espacios para la velocidad de Pombo y Beltramone más el oportunismo de Salinas, Defensores empató con un bombazo desde afuera de Moyano y amplió Aguirre que agarró a la defensa mal parada luego de una pérdida de Salinas en mitad de cancha.
El segundo tiempo fue un festival del equipo de Carlos Mayor. A los 9 y a los 11 se puso 4 a 1 y se floreó por San Martín ante la impotencia de un equipo que casi no pateó al arco ni tuvo reacción para ir a buscar el descuento.
A esta altura el partido tiene que pasar rapidamente al olvido. Lo que no podemos olvidar es lo que pensábamos todos hace apenas un mes (o menos). Chaca tiene plantel para ascender. No tengo la más mínima duda y Biggeri tiene que ser el capitán del barco hasta la final del campeonato. Es el único que lo puede sacar adelante porque tiene con qué. Seguramente si hay problemas de algún tipo se tendrán que solucionar y de a poco tienen que volver en condiciones los jugadores lesionados.
Hoy Salinas fue una sombra del que vimos con Ferro, Pisano entró también con el partido casi definido, Brandán bajó notoriamente su nivel después del partido con Tigre. No sabemos por qué salió Passaglia cuando habían armado un buen tándem con Watson que casualmente también redujo su nivel.
Se les está dando oportunidades a jugadores como Pombo y Beltramone que no terminarán de aparecer (tampoco ayuda como está jugando el equipo).
Hay mucho por trabajar y tiempo de sobra (recién van 7 fechas). Acá no hay fin de ciclo ni mucho menos.
Cuando hay un fuerte temporal como sucedió esta semana en todo el país, hay que esperar que amaine hasta que bajen las aguas, se pueda volver a transitar y hacer vida normal. Algo así le viene pasando a Chaca desde hace un mes. Lo único que queda es seguir trabajando hasta que se revierta y vuelva a salir el sol. Hay quien conoce mejor que nadie que pasa cuando llueve en San Martín. Y es el que lo va a sacar adelante. No tengo dudas
Gustavo Szpigiel
Foto Prensa Chaca
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